La historia de la fibrilación auricular de Scott

scotts-storyScott tiene una historia única; nació con un prolapso defectuoso de la válvula mitral; es decir, que la válvula cardíaca izquierda no cerraba por completo provocando que la sangre se filtrara hacia atrás. El defecto fue descubierto como parte de un examen físico de rutina hace muchos años. En ese momento se le informó que su condición no perjudicaría su estilo de vida ni requeriría cirugía; podía continuar con sus actividades diarias y así lo hizo. El estilo de vida de Scott era muy activo y como exoficial de policía, mantenerse en forma era una necesidad. Scott estaba acostumbrado a caminar cientos de kilómetros a lo largo de los senderos del Parque Nacional Sahuaro, pero recientemente comenzó a experimentar dificultades para respirar y pensó que era la gripe. Gracias al consejo de un amigo, fue a ver a su médico.

Scott fue diagnosticado con fibrilación auricular, lo que causa latidos cardíacos irregulares. Se le realizaron pruebas para ver si esto estaba relacionado con su prolapso de la válvula mitral, pero durante su recuperación de las pruebas, el corazón de Scott entró en un latido cardíaco irregular, taquicardia ventricular, que podía llegar a ser fatal si no se trataba. Su cardiólogo, el Dr. Joseph Chambers, lo transfirió al Instituto Cardíaco y Vascular Carondelet en el St. Mary's Hospital, donde el Dr. Talal Moukabary corrigió su prolapso de la válvula mitral.

Después de su cirugía, Scott comenzó su programa de rehabilitación cardíaca en el Carondelet St. Joseph's Hospital. Recibió un alta temprana de su programa de rehabilitación porque su cirugía era correctiva y ya hacía ejercicio desde antes. A pesar de terminar anticipadamente su rehabilitación, vio un gran beneficio en asistir. El programa reúne a participantes que comparten experiencias similares. “Es un gran grupo de personas que están superando problemas cardíacos y están decididas a mejorar”, dice Scott. Como resultado de la asistencia regular, Scott ahora es consciente de los cambios que puede hacer, incluso en su dieta. En una de sus clases aprendió que la sal, la grasa y el azúcar son los sabores que más les gustan a los seres humanos. Él es culpable de agregar sal, por lo que ha disminuido su consumo, lo que resulta en una mejora de su presión arterial.

Scott estaba en buena forma física porque caminaba. Ha regresado a los senderos del Parque Nacional Sahuaro, donde se le puede encontrar varias veces a la semana. Su consejo es simple: “no necesitas una membresía en el gimnasio, solo un par de zapatos decentes para caminar”.